El 18 de
Febrero de 1984, el equipo juvenil de Maristas de Pamplona ganaba el campeonato
navarro ganando por 93 a 68 en una final disputada contra la Ikastola San
Fermín.
Las crónicas
de la época hablan de un dominio absoluto, como lo demuestra la gran diferencia
que mostraba el marcador final. En el partido destacó sobremanera Moreno con 39
puntos, bien arropado por Morrás con 18, Iriarte con 10 y Solchaga con 14. El conjunto,
entrenado por Miguel Javier Guelbenzu y con Oscar Rebolé como delegado,
alineaba a Alberto Iriarte, Javier Ros, Javier Lacasia, Jordi Marcó, Toñín
Millán, Angel Sobrino, Javier Morrás, Juan Antonio Moreno, Danel Echeverría,
José Ibáñez y Luis Solchaga. Contaban, además, con una mascota: un perrito de peluche
de color violeta al que llamaban “La Maripuri” y que celosamente cuidaba
durante la semana el jugador que cometía el error más grande durante la
celebración de los partidos.
Gran parte de
los alumnos y profesores del Colegio Marista se dieron cita en las
instalaciones del Club Natación Pamplona para animar al equipo y tienen en sus
mentes el recuerdo entrañable del Hno. Zabaleta, que en paz descanse,
participando en la algarabía de las aficiones “armado” con una trompeta de
caza.
Poco más de 20
años después el grupo se volvió a unir para revivir aquellas fechas. El pasado
sábado 11 de Septiembre fue el día elegido. Los “festejos” comenzaron con un
partido de viejas glorias en el patio de Maristas, lugar en el que tantas horas
pasaron entrenando. Y para acabar, una buena cena en una sociedad de Pamplona en
la que recordar las mil y una batallas vividas en los terrenos de juego. A la
jornada únicamente faltó Luis Solchaga que reside en Ohio, mientras que el entrenador,
Miguel Javier Guelbenzu, no disputó la pachanga, incorporándose a la cena ya
que se encontraba en Alcalá en la reunión de coordinadores de Informática de
los colegios de la provincia Ibérica Marista.